miércoles, 30 de abril de 2008

¿A alguien le interesa cómo escribo?

Aprovecho un comentario "tonto" de Yelacis a la entrada anterior para cascarme un post con todo el morro, que si no no actualizo ni a tiros.

Qué va, chica, en la libreta verde no, que es muy chiquitina y bastante incómoda para escribir textos medianamente largos. Lo que sí uso es otra libreta de tamaño medio, bastante gordita y con las tapas de Harry Potter y la Cámara Secreta que me compró mi tía en los chinos. Es de anillas, y en el lateral cabe perfectamente un boli. Suelo llevarla siempre conmigo y, contra todo pronóstico, tiene escritas más de la mitad de sus páginas. ¿Con qué? Pues con todas las movidas que desde hace un tiempito llenan mi ya menos oxidada neurona: sincolumnas, relatos -que, por cierto, acabo de ganar por segunda edición consecutiva el concurso que hacemos en el curro, ¡soy taaaaaaaaaaaaan feliz!-, entradas para el blog, ideas para best-sellers, proyectos entrevistas y crónicas para Una copa con... Abro esa libreta por una página al azar y sonrío, me hace sentir bien, más viva que antes al menos.

Lo curioso es que, salvo un relato si no recuerdo mal, ninguno de los textos que hay en la libreta está completo. Fecha, título, algunas líneas, a veces unas pocas páginas... El muso viene cuando menos te lo esperas, ¿no? Algo de eso comentaba en el post anterior: estoy en un bar, en el metro, en una rueda de prensa (ejem), por la calle, y se me ocurre una idea. Si ando liada, trato de memorizarla (¡craso error!) pero, si puedo, intento empezar a escribir. Y una vez que tengo el principio lo demás va rodado: en cuanto llego a casa (o al curro) y me siento frente al ordenata escribo todo del tirón.

Claro que, a veces, el muso viene forzado cuando tiene que venir. Generalmente, los domingos por la noche. Entonces escribo directamente en el ordenador. Como ahora.

1 comentario:

Yelacis dijo...

Y murieron por cotillas ;)